Migraña, ira contenida.
Hace unas semanas un cliente de 8 años se presentó al consultorio con migraña. ¿Es posible que un niño de 8 años pueda sufrir migrañas? me preguntó su mamá. El cuerpo es nuestro amigo, y para protegernos, sintomatiza lo necesario para liberar emociones contenidas que pueden causar estragos mayores, así que sí, es posible. Y además, es la puerta de entrada a su "healing journey" o "camino de sanación".
Llamamos migraña a un desorden crónico caracterizado por dolores de cabeza y náuseas que van desde lo moderado hasta lo severo. Típicamente la migraña es un dolor pulsátil que afecta un lado del cerebro y tiene una duración de entre 4 a 72 horas, es más común entre mujeres que hombres, en un tercio de casos es precedida por lo que se conoce como "aura", transtornos transitorios ya sean motores, lingüísticos o visuales, y los síntomas incluyen náuseas, vómitos, fotofobia (fobia a la luz) y fonofobia (fobia al sonido). Si bien se considera un desorden neurológico, al parecer aún no hay suficiente evidencia para confirmar esta teoría. De todas formas, se sugiere realizar una evaluación neuro-pediátrica como parte del diagnóstico inicial.
Entre los cuidados que sugerimos para evitar los episodios de migraña en niños se encuentran:
Eliminar de la dieta alimentos que puedan detonar las migrañas, como alimentos con glúten.
Establecer una rutina donde los alimentos y horas de sueño sean siempre a la misma hora.
Inscribirlo en un programa regular de ejercicio aeróbico, como la natación. Si el niño tiene edad para hacerlo, puede salir a caminar con los padres durante al menos 30' contínuos.
Puesto que la migraña es el mensaje que utiliza el cuerpo para comunicarnos lo que está sucediendo en el niño, para nosotros es necesario integrar en paralelo herramientas que nos conduzcan a la raíz que la está generando.
Una de las causas suele ser ira al estar sometidos bajo mucha presión y pensar que uno está siendo conducido sin capacidad de control, de ejercer nuestra voluntad, donde nuestras necesidades no serán satisfechas o donde no pertenecemos.
Es por esto que para nosotros es importante trabajar las razones que se encuentran detrás de la migraña, integrando varios aspectos de la persona:
Tratando la parte verbal a través de la psicoterapia, para activar recursos en la persona con los cuales pueda lidiar de manera diferente ante la situación de conflicto. En el caso de mi cliente, tenía problemas para manejar la relación con su hermana mayor, quien tiene una personalidad más fuerte y lo agrede constantemente.
Tratando la parte emocional a través de técnicas de liberación somato-emocional, como son la terapia cráneo-sacral, healing touch, esencias vibracionales, meditación regresiva, EFT, etc.
Entre la diversidad de tratamientos alternativos que existen, es importante la relación terapeuta-cliente. Se conoce como terapeuta a un médico, psiquiatra, psicólogo y recientemente a un sanador certificado. Sugerimos que si en la segunda sesión no se ven algunos cambios, la persona cambie de terapeuta, no porque no sea un buen terapeuta, sino porque quizá no sea lo adecuado para la persona. El total de sesiones dependerá de lo que el cliente desee trabajar, procesar e integrar, ya que a veces, como con la cebolla, al pelar una capa encontramos que la raíz no era esa, sino que estaba debajo, es por eso que le llamamos "healing journey".